Contaminación del Suelo
Queridos amigos!
Hoy damos comienzo a una nueva serie de posteos, la cual estará dedicada al suelo. Veremos distintas aristas de este tipo de contaminación que, siendo la más perjudicial, es la que menos se menciona en nuestro país. Comencemos!
La contaminación del suelo ocurre cuando las cualidades originales de una porción de terreno superficial o subterráneo han sido modificadas por la acción humana, incorporando algún agente contaminante. Para establecer el umbral máximo de concentración (o cantidad permitida) de un contaminante en el suelo, debe tomarse en cuenta la capacidad de cada compuesto para degradar la calidad del suelo, haciéndolo perder alguna de sus características originales, y que resulte en un riesgo o un daño al ambiente.
Los suelos pueden presentar contaminación física por variaciones en temperatura, humedad, etc; contaminación química (la más común) por adición de elementos o compuestos en concentraciones que alteran su composición original; y contaminación biológica, reflejada por la proliferación de especies o cepas patógenas o ajenas a las especies vivas características del lugar. La poca movilidad de los suelos, en comparación con el aire y el agua, hace que la dilución de los contaminantes sea mucho menor, provocando que los contaminantes permanezcan, en general, bastante más tiempo en el lugar que fueron liberados.
La cantidad de compuestos que pueden convertirse en contaminantes del suelo es enorme; entre los grupos más característicos podemos mencionar los metales pesados, los contaminantes inorgánicos (fosfato, amonio, fluoruro, cianuro, sulfuro, bromuro, etc) y los contaminantes orgánicos (compuestos aromáticos como el benceno, hidrocarburos policíclicos como el naftaleno, hidrocarburos clorados como el clorobenceno, plaguicidas, etc).
Los residuos generados por las actividades del hombre han sido históricamente depositados en el suelo, debido a su cercanía y fácil acceso. En un principio, la cantidad de residuos era poco significativa y su composición hacia que fueran fácilmente degradados por los mocroorganismos como parte del ciclo natural de la vida. Sin embargo, a medida que la sociedad se ha ido desarrollando, sobre todo industrialmente, la cantidad de residuos ha aumentado dramáticamente; más aún, el tipo de residuo ha cambiado, incluyendo los compuestos tóxicos que presentan grandes riesgos para los seres vivos y el ambiente. Además, este aumento en la generación de residuos ha traído como consecuencia una significativa disminución de las materias primas, mientras que su abandono origina serios problemas ambientales al incorporarse los contaminantes a los procesos físico - químicos de la naturaleza.
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